SANTIAGO, 26 jun (DF) — Como uno de los protagonistas de la guerra comercial que tiene a los inversionistas globales al borde del asiento, se podría esperar que la bolsa china mostrara señales de debilidad. Pero se está dando todo lo contrario: las acciones del país asiático superan por amplio margen el desempeño de otras regiones del mundo, incluso considerando que se ha generado una masiva salida de capitales extranjeros.
En lo que va del año, el índice CSI300 -que agrupa a las mayores compañías que cotizan en las bolsas de Shanghai y Shenzhen- acumula una escalada de 26,03%, superando por diez puntos el desempeño de Wall Street en la primera mitad del 2019.
Estas cifras dejan atrás a todos los otros parqués relevantes del mundo, pese a que tanto los mayores índices de Nueva York como los de Europa han rentado más de 10% en lo que va del año. Ni siquiera los mayores ganadores de América Latina -el Bovespa brasileño, el Merval argentino y el Colcap colombiano han crecido más de 10% en ese periodo también, medido en dólares- se comparan.
Y esto se ha dado gracias a capitales locales, considerando que los flujos netos en estos seis meses han sido de salida.
¿Qué pasa entonces?. Desde el mercado indican que los inversionistas locales en China han estado premiando las señales de compromiso que ha dado el gobierno para mantener la economía a flote.