BEIJING, 28 abr (Prensa Latina) — China refutó hoy rumores sobre una presunta coerción económica contra Australia por sugerir una investigación independiente sobre los orígenes y propagación del coronavirus SARS-CoV-2 y la consecuente neumonía Covid-19.
Geng Shuang, vocero del ministerio de Relaciones Exteriores, consideró sin argumentos que la prensa del país oceánico defina como represalias las declaraciones del embajador en Canberra, Cheng Jingye, acerca de la pesquisa.
“Lo que el embajador dijo es que la insatisfacción e inquietudes causadas en los ciudadanos chinos por los comentarios falsos de Australia podrían tener impacto en las relaciones bilaterales”, indicó, al enfatizar que nunca se habló de coerción económica.
Jingye mencionó en una entrevista con medios de aquel estado sobre el posible rechazo de sus compatriotas a productos y universidades australianos, debido a la insistencia en desarrollar una nueva indagatoria en el gigante asiático acerca del brote infeccionso.
Según Geng, Beijing desea mantener relaciones de cooperación y amistosas con otras naciones, pero sobre la base del respeto mutuo y la igualdad.
También se refirió a la disposición de suministrar asistencia a los países con dificultades y contribuir al cuidado de la salud pública en el planeta.
En repetidas ocasiones, China ha reiterado que la búsqueda del origen exacto del patógeno SARS-CoV-2 no debe convertirse en un juego de acusaciones o demanda de compensaciones a otros.
