SANTIAGO, 15 jul (El Mercurio) — Por más de diez años se arrastra el conflicto judicial que enfrenta a Scotiabank con un sindicato del ex Banco del Desarrollo, empresa que posteriormente fue adquirida por la institución financiera de capitales canadienses.
Para entender el caso hay que remontarse al año 2008, cuando según el sindicato, el banco elevó sus provisiones de riesgo, afectadon con ello sus resultados, para así evitar el pago de un bono por utilidades a los empleados. Dos años después, la agrupación de trabajadores demandó al Scotiabank por el incumplimiento del contrato ante el 3er Juzgado Laboral de Santiago.
Según argumenta la compañía, “a pesar de que el año 2008, en medio de la crisis subprime, el Banco del Desarrollo tuvo pérdidas por $29.326 millones, el Sindicato ha pretendido cobrar judicialmente una asignación de estímulo que dependía de la existencia de utilidades. El Sindicato ha basado sus cálculos en una rentabilidad que el Banco del Desarrollo históricamente nunca tuvo”. Añade que el sindicato invoca que el banco tuvo “una rentabilidad de 63,05% el año 2008 -en plena crisis financiera- en que el Banco que adquirió Scotiabank tuvo pérdidas y la industria rentó solo un 15%.
Luego de diversos fallos, el caso llegó a la Corte Suprema mediante un recurso de casación de Scotiabank, fallándose en 2013 a favor del sindicato. El fallo, sin embargo, no señaló el monto ni los elementos de cálculo para el pago al sindicato, “limitándose a señalar que se debía considerar para esto la información financiera que debía proporcionar el Banco”. Segú el relato de la empresa, en los años posteriores el sindicato presentó demandas de cobro en reiteradas ocasiones; sin embargo, “las acciones judiciales del Sindicato no prosperaron”, dice Scotiabank.
No obstante, en marzo recién pasado, fue notificada de una nueva demanda del sindicato contra Scotiabank, y esta vez “el Tribunal de Cobranza Laboral, a petición del sindicato, liquidó la suma demandada con reajustes e intereses en $11.028 millones”.
La empresa objetó la decisión del tribunal basándose en las “pérdidas del ejercicio 2008 y la falta de representatividad del Sindicato respecto de los 897 socios que estaban en la demanda del año 2009 y que en su gran mayoría en la actualidad no forman parte del Sindicato ni del Banco”. Además, el banco presentó excepciones de fondo contra la demanda, alegando entre otras, la prescripción de la acción y la cosa juzgada, puel el tribunal de cobranza en dos ocasiones desechó la causa del Sindicato.
¿Qué viene para adelante? Según la empresa, “el Tribunal de Cobranza deberá pronunciarse sobre la objeción al monto liquidado y las excepciones presentadas por el Banco y, posteriormente, deberá desarrollarse la etapa probatoria. En todo este proceso es posible deducir recursos ante la Corte de Apelaciones de santiago y luego ante la Corte Suprema”.