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BEIJING, 17 may (Xinhua) — China continuó experimentando un mercado inmobiliario generalmente estable en abril, y los precios de las viviendas en 70 ciudades importantes mostraron aumentos moderados en comparación con el mes anterior, según mostraron hoy lunes los datos oficiales.

Los precios de las viviendas nuevas en cuatro ciudades de primer nivel (Beijing, Shanghai, Shenzhen y Guangzhou) aumentaron un 0,6 por ciento intermensual en abril, por encima del aumento del 0,4 por ciento registrado en marzo, según datos del Buró Nacional de Estadísticas (BNE).

En abril, un total de 31 ciudades de segundo nivel experimentaron un aumento intermensual del 0,6 por ciento en los precios de las viviendas nuevas, mientras que 35 ciudades de tercer nivel reportaron un aumento intermensual del 0,4 por ciento en los precios de las viviendas nuevas.

El mercado de bienes raíces de segunda mano en las ciudades de primer nivel registró un aumento intermensual de precios del 0,8 por ciento en abril, bajando 0,2 puntos porcentuales en relación con el alza de marzo.

Los precios de las casas de reventa en las ciudades de segundo nivel experimentaron un crecimiento intermensual del 0,5 por ciento, mientras que el indicador en las urbes de tercer nivel subió un 0,3 por ciento.

En la comparación interanual los precios de las viviendas registraron una expansión más rápida, según el BNE.

Los precios de las viviendas nuevas en las ciudades de primer nivel aumentaron un 5,8 por ciento en abril, por encima del incremento del 5,2 por ciento registrado en marzo, mientras que en las ciudades del segundo nivel subieron un 4,9 por ciento, frente a la expansión del 4,8 por ciento del mes anterior.

Los precios de las viviendas de reventa en las ciudades de primer nivel crecieron un 11,3 por ciento interanual, disminuyendo 0,1 puntos porcentuales en relación con el alza de marzo.

Datos separados del BNE mostraron el lunes que la inversión de China en desarrollo inmobiliario aumentó un 21,6 por ciento interanual en los primeros cuatro meses de este año, mientras que las ventas de viviendas comerciales aumentaron un 48,1 por ciento interanual en términos de superficie, ubicándose en 503,05 millones de metros cuadrados.

El gobierno ha mantenido una estricta regulación del sector inmobiliario, incluyendo restricciones a la compra de viviendas y políticas hipotecarias más estrictas, garantizando que “la vivienda es para vivir, no para la especulación”.