SANTIAGO, 24 jun (DF) — Mientras el comercio mundial busca alternativas para mitigar las consecuencias de las interrupciones en el puerto de Yantian -que a fines de mayo suspendió sus operaciones debido a un brote de Covid-19 y no ha vuelto a operar al 100%- los exportadores chilenos parecen estar sobrellevando sin mayores efectos la crisis global.
Los gremios locales están monitoreando lo que ocurre en los terminales de las provincias de Shenzhen y Guangzhou -a los que arriba cerca del 10% de la carga nacional para China, destacando frutas frescas, madera y cobre-, pero no han sufrido impactos significativos hasta el momento.
El presidente de Fedefruta, Jorge Valenzuela, explica que ahora se están enviando al gigante asiático productos como cítricos, en volúmenes menores a los de temporada alta, los que arriban a otros puertos que están especializados en la carga de perecibles.
“No hemos visto hasta el momento efectos importantes en la comercialización de cítricos chilenos que se exportan a China”, aclara Valenzuela, pero sincera que “estamos atentos a la situación naturalmente, porque este brote en el puerto de Shenzhen ha preocupado a todo el comercio internacional y ha afectado el tráfico marítimo”.
Similar es lo que relata el presidente de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (Asoex), Ronald Bown, quien plantea que lo que ocurre en Yantian “es un tema que nos preocupa, porque puede provocar escasez de contenedores refrigerados, que se están quedando atascados en Asia y no retornan a Chile, proceso que ya vivimos en plena temporada frutícola”.
Los envíos de carnes de aves y cerdos tampoco se han visto afectados, indica el presidente de ChileCarne, Juan Carlos Domínguez, pero no por eso han bajado la guardia. De hecho, el gremio vigila a diario lo que ocurre en todos los puertos del país junto a las autoridades de la embajada de Chile en China.