MADRID, 31 mar (FXEmpire) — A comienzos de marzo, China estableció su estimado de crecimiento económico en “alrededor de 5,5%” pero, a pesar que este estimado es el menor de los últimos 30 años, las proyecciones de los principales bancos de inversión se ubican por debajo de esa cifra.
Desde comienzos de este año, la mayoría de los economistas manifestaron que sería complicado que la economía china logre crecer a un ritmo cercano a su potencial de largo plazo, argumentando la debilidad mostrada durante el último trimestre de 2021, cuando el crecimiento se ubicó en +4%.
Según el último reporte de Nomura, la economía china “puede haberse deteriorado notablemente en marzo”, afectada por las restricciones de movilidad impuestas en el país debido al nuevo incremento de los casos de Covid-19.
La caída en la actividad de los sectores de servicios personales, construcción y manufactura, “dificultan que el país alcance su objetivo de crecimiento de 5,5% durante el 2022”.
Los estimados actualizados del banco de inversión apuntan a un crecimiento de +4,2% durante el primer trimestre, mientras el crecimiento promedio para el año completo se ubicaría en +4,3%.
En su reporte, los economistas de Nomura argumentan que el gobierno “deberá tomar medidas para impulsar el crecimiento”.
Entre esas medidas estiman un recorte de 0,50% del porcentaje de reservas requeridas para los bancos y una disminución de 0,10% a la tasa que cobran por los préstamos a un año y por los acuerdos de recompra a 7 días.
Riesgos de aceleración de la inflación
Por otro lado, el incremento en los precios de los alimentos, exacerbado por la invasión de Rusia a Ucrania, representa un enorme riesgo para una economía que importó $133.000 millones en el 2019 y que ya experimenta una elevada inflación en este rubro.
Adicionalmente, según estimados de Goldman Sachs, el efecto de una subida de los precios del petróleo podría representar una caída de -0,5% en el producto interno bruto del país.
Un factor que podría contribuir a que la inflación no acelere tanto, es que China podría lograr condiciones favorables en la compra de alimentos y energía provenientes de Rusia, en caso que las sanciones obliguen al gobierno ruso a aceptar menores precios para lograr redireccionar sus exportaciones de Europa al continente asiático.