Visita nuestro archivo

SANTIAGO, 15 sep (El Mostrador) — Stella Li es una de las ejecutivas más poderosas de China. La vicepresidenta ejecutiva de BYD es la que maneja el negocio en Estados Unidos, Canadá y América Latina y, en la práctica, es la número dos de la empresa.

Apuesta a Chile para “construir la cadena de valor agregado en litio más grande de Latinoamérica”. A mediados de agosto anunció la inversión por US$ 290 millones para construir una fábrica de cátodos de litio en el norte de Chile y, en paralelo, está haciendo una fuerte apuesta a la electromovilidad con el lanzamiento de BYD Auto Chile, que se suma a su fuerte presencia en el mercado de buses eléctricos y sus planes para entrar en el negocio del almacenamiento.

Lo que se produzca en Chile será usado en las fábricas de autos eléctricos que están construyendo en Brasil. En agosto El Mostrador fue parte de una delegación que visitó BYD y Shenzhen, China, en el marco de una invitación. Ahí pudimos conversar con la ejecutiva acerca de sus planes y desafíos para seguir creciendo en Chile.

Dijo que el Gobierno tiene que ser más audaz para impulsar la transición energética y la electromovilidad, es optimista acerca del futuro del litio y tiene planes para seguir invirtiendo, pero lamentó que aún no haya podido reunirse con el Presidente Gabriel Boric. Entre sus sugerencias está rebajar el IVA para autos eléctricos y que el Estado apueste a una red nacional de cargadores de baterías eléctricas.

-BYD ha sido muy optimista respecto de Chile y el litio. Anunció una gran inversión y habla de planes para desarrollar y construir una fábrica. ¿Por qué son tan optimistas si en Chile todavía se debate qué van a hacer con la política de explotación y producción?

-En realidad, BYD es una empresa con mucha paciencia. Y una razón más importante es que tenemos muy buenos clientes en Chile y ya hemos tenido mucho éxito. Como saben, Chile es el primer país en el que introdujimos los primeros 200 buses eléctricos en el mercado. La empresa ya lleva cinco años funcionando y los resultados de los datos son muy exitosos. Esto aumenta la confianza de nuestros clientes.

El mismo cliente, METBUS, ya ha realizado una nueva compra. A finales de año tendremos cerca de 1.000 autobuses eléctricos operados por un único operador privado de autobuses. Entonces esta es la confianza. No es del Gobierno, sino de los operadores privados. Creen en esta tecnología, confían en esta. Esperamos que la historia se pueda repetir en otros sectores, por ejemplo, en la industria minera, en la industria del taxi. Y luego esperamos que el Gobierno pueda ofrecer más incentivos para la infraestructura de cargar las baterías.

-¿Puede darnos –ha hablado de incentivos– uno o dos ejemplos de qué tipo de incentivos puede dar el Gobierno chileno para que esto despegue?

-Un gran incentivo sería incentivar el desarrollo de la infraestructura de carga de baterías eléctricas. Podría ser una red estatal de carga a lo largo del país. Por ejemplo, el Gobierno podría trabajar con empresas de servicios públicos, como Enel, para desarrollar este programa para cualquier cliente o consumidor. Si una persona compra un auto eléctrico, tal vez el Estado le instale el cargador/batería gratis y les den seis meses o incluso un año de electricidad gratis como incentivo. Este es un incentivo.

En segundo lugar –y muchos países lo hacen–, si compran un automóvil eléctrico, tal vez obtengan un incentivo del impuesto de importación cero. Pero Chile es un país que no tiene ningún derecho de importación, pero sí tiene un IVA muy alto. Entonces, tal vez para los automóviles de consumo se puedan desarrollar incentivos para la gente. Si compra vehículos eléctricos, el IVA puede ser del 5% o del 0%. Entonces, se comienza con este tipo de gran incentivo para ayudar a construir el mercado.

-En Chile, BYD está principalmente en el negocio mayorista con clientes institucionales. Están en la etapa preliminar de construir un proyecto de litio en el norte. Además ya tienen el negocio de los buses eléctricos, pero ahora están entrando con fuerza en el mercado automotor con foco en el mercado del retail. Dentro de cinco años, ¿cómo cree que será el negocio de BYD en Chile?

-Pienso más en el mercado retail automotor con una relación más directa con el consumidor final. A finales de este año, nuestro socio, Astara, construirá más concesionarias 4S, también mostrará nuestros autos en centros comerciales y, además, brindará el mejor servicio para los coches eléctricos. Entonces, el consumidor empezará a experimentar la belleza y el ahorro del coche eléctrico. Así que recuerden, Chile, el precio de su gasolina es muy caro y el costo de la electricidad es bajo. Esperamos que este tipo de ahorro pueda educar al consumidor. Manejar un coche eléctrico no solo ayuda a reducir CO2, sino que además económicamente es más barato y supone un gran ahorro.

-Chile tiene metas muy ambiciosas en materia de electromovilidad y la transición hacia una matriz energética limpia, ¿cree que, cuando lo mira como un negocio para los próximos 10 años, esos objetivos sobre la electromovilidad y la transición hacia una economía verde son realistas o Chile está siendo demasiado ambicioso?

-Es realista. Incluso en Shenzhen (el Silicon Valley de China), con toda la electrificación, comenzamos con los autobuses y luego con los taxis. Vemos que Chile está repitiendo un patrón similar. Lo único que falta aquí es la infraestructura de carga y un plan de incentivos para adopciones un poco más tempranas, como mencioné, tal vez otorgar un IVA especial para el propietario de un automóvil eléctrico en los primeros uno o dos años. Construyan el mercado primero. ¡Y rápido!

–Sobre la inversión de US$ 290 millones para producir cátodos de litio en el norte: el gran obstáculo podría ser la permisología.

-Esto es algo que todavía necesitamos para seguir el proceso, el contrato y, también, obtener la aprobación y los permisos ambientales. Una vez que tengamos todo listo, en menos de dos años, las instalaciones podrán estar listas. Pero obtener la aprobación, la aprobación ambiental y toda la licencia, llevará quizás mucho tiempo.

–BYD es un gigante verde que pocos conocen en Chile. Es rival de Tesla a la hora de fabricar autos eléctricos, casi un tercio de todas las baterías de celulares las hace BYD y son líderes mundiales en el desarrollo de almacenamiento de energías renovables. Su objetivo es dar soluciones energéticas de emisiones cero, que reducen la dependencia mundial de los combustibles fósiles.

Un dato que destaca: su inversión en Investigación y Desarrollo supera regularmente sus utilidades netas. Es una de las razones por las que Warren Buffett es uno de sus principales inversores. El oráculo de Omaha apostó por la firma china hace 15 años y ha triplicado su inversión.