SANTIAGO, 17 ene (Mundoagro) — Según un reciente informe del Departamento de Agricultura de EEUU (USDA), se prevé un aumento en la producción nacional de naranjas en China durante el período 2023-2024 (12 meses hasta el 31 de octubre de 2024), alcanzando las 7,63 millones de toneladas. Este aumento se atribuye al crecimiento en regiones clave de producción.
Se espera que la provincia de Jiangxi, principal productora de naranjas Navel en China, contribuya significativamente a este incremento con un aumento proyectado del 15%. Este crecimiento se debe a las abundantes lluvias entre julio y septiembre y a la replantación de árboles tras los ataques de la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos, lo que dará como resultado una mayor cosecha. A pesar de que estas lluvias han favorecido una mayor producción, se anticipa que afectarán negativamente al nivel Brix de la fruta, disminuyendo su calidad general.
En cambio, se anticipa que las regiones de Hunan y Hubei mejorarán la calidad de la fruta en esta temporada, aunque los niveles de producción se mantendrán estables. Se pronostica que los niveles más bajos de Brix afectarán los precios de las naranjas Navel, con una predicción de una caída del 12 al 30% interanual, según envasadores y distribuidores.
El informe del USDA señala que los precios promedio de las naranjas Navel en los huertos serán de 3,6-4,8 RMB (US$ 0,51-0,69) por kg, mientras que los precios promedio en Hubei y Hunan serán aproximadamente US$ 0,05 menos.
Además, se destaca que la robusta producción nacional está reduciendo la necesidad de importaciones de naranjas. Asimismo, la creciente conciencia de costos entre los consumidores también podría contribuir a la disminución de las importaciones, que suelen tener un precio más elevado. El informe predice una ligera disminución anual de las importaciones de naranjas hasta alcanzar las 210.000 toneladas, tras una reducción del 4,6% en 2022-2023. Se espera que las exportaciones se mantengan estables en 50.000 toneladas, impulsadas por el aumento de la oferta y una mayor demanda de Rusia después de las restricciones comerciales en respuesta a la guerra en Ucrania.