Los consumidores asiáticos, que representan alrededor de la mitad de los compradores totales, son los que más gastan en el mundo en artículos de moda de alta calidad. La mayoría de ellos son menores de 35 años, usuarios constantes de Internet, cada vez más preocupados de adquirir productos nuevos y originales, que los diferencien de sus padres. Según los expertos, la calidad ya no es del dominio exclusivo de las marcas de lujo occidentales, puesto que las marcas asiáticas están atrayendo la atención a medida que experimentan con nuevos materiales, facilitado por su amplia base de fabricación local. Grandes marcas como Prada, ya sufren un desplome de ventas, debido en parte al excesivo aumento de precios, la sobreexposición en ciertos mercados y la fatiga propia de ser una mega-marca. En tanto, marcas de moda chinas, como Ms Min y Comme moi, son las de más rápido crecimiento, con puntos de venta en todo el país asiático. Algunas etiquetas incluso, se han establecido también en Occidente, circulando en semanas de la moda en Milán y París.
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