China es un mercado tan grande y potencialmente tan lucrativo que muchas empresas simplemente no pueden permitirse el lujo de ignorarlo. Muchas multinacionales están descubriendo que tienen que llegar a ser más chinos incluso con el fin de sobrevivir. El ejemplo más reciente lo constituyó el anuncio de Uber de vender su negocio a la competencia china local, poniendo fin a una costosa batalla de participación en el mercado. El gobierno chino ha sugerido desde hace mucho tiempo que las empresas extranjeras tengan un socio local en aquellos sectores considerados sensibles para la seguridad del país. Al mismo tiempo, dado que el crecimiento económico de China se ha enfriado en los últimos trimestres, las empresas extranjeras se han quejado de un empeoramiento del clima, en donde son menos bienvenidas que antes. Investigaciones antimonopolio y anticorrupción también han afectado a empresas como Microsoft, Qualcomm y GlaxoSmithKline en los últimos años. A veces, las empresas luchan para proteger su propiedad intelectual, producto de una prolongada batalla contra las falsificaciones. Sin embargo, las empresas deben “aprender a jugar el juego en China”.
Para leer el artículo completo haga click aquí