BEIJING, 8 ago (Xinhua) — La demanda inmobiliaria de China seguirá fuerte hasta 2030 mientras que la volatilidad del mercado persiste a corto plazo, según un informe publicado por la agencia de calificación global Fitch.
China ha de construir 800 millones de metros cuadrados de propiedad residencial, equivalente al tamaño de Singapur, cada año entre 2016 y 2030 para satisfacer la demanda, precisó el informe.
Durante el periodo, se prevé que el suministro de nuevas viviendas ronde los 750 millones de metros cuadrados anuales, una caída del 25 por ciento frente a la estimación anterior de la agencia, mientras que se prevén similares niveles de ventas de nuevas viviendas.
A pesar de que caerá el volumen de nuevas viviendas a la venta y aquellas por terminar en China, el margen de caída podrá ser modesto en términos anuales, sostuvo el informe.
El mercado inmobiliario de China se había enfriado por más de un año antes de una todavía desigual recuperación a partir del segundo semestre de 2015, fomentado por las medidas de apoyo del gobierno, como los recortes de los tipos de interés y la bajada del coeficiente de depósito.