Cada vez más empresas chinas están tomando conciencia de que deben innovar para llegar y mantenerse en la vanguardia de la economía mundial. Las autoridades también han reconocido la importancia de permitir una mayor competencia en la economía, por lo que el gobierno de China respalda fuertemente a las empresas que desarrollan una capacidad para producir innovaciones autóctonas. En la reunión anual del Foro Económico Mundial, celebrada el pasado mes de enero en Davos, Suiza; los funcionarios chinos explicaron las reformas básicas que su gobierno introdujo hace dos años con el fin de aumentar la competencia. La idea clave es que cuando las empresas existentes están protegidas frente a nuevos participantes que ingresan en el mercado trayendo consigo nuevas ideas, el resultado será menos innovación y menos adaptación. Occidente parece haber olvidado esto.
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