Una delegación especial de Estados Unidos estuvo en China esta semana para abordar la disputa comercial entre ambos países, con la amenaza latente de escalar hacia una guerra comercial entre las dos economías más grandes del mundo. Pero las quejas del presidente Donald Trump van mucho más allá y también se extienden al programa “Made in China 2025”, una estrategia de mejora industrial que apunta a cambiar la economía del país asiático en sectores manufactureros de mayor valor agregado, como el robótico, aeroespacial y vehículos de ahorro de energía. Aquí hay cuatro aspectos para conocer un poco más sobre esta estrategia.
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