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SANTIAGO, 2 may (El Mercurio/WSJ) — La gigante tecnológica china Huawei delineó los detalles de su estructura de propiedad, en un intento por refutar a aquellos críticos que han puesto en duda la declaración de la compañía, de que pertenece y es administrada por sus empleados.

La compleja estructura corporativa descrita, por el contrario, probablemente no logre acallar las sospechas de que la empresa no es completamente independiente de Beijing, y confirma que poderes clave se mantienen en manos de su fundador, Ren Zhengfei, ex miembro del Ejército. En es propietario sólo del 1% de la empresa holding de Huawei, pero ha estado al mando por más de tres décadas, aprueba los miembros del directorio y puede vetar cualquier decisión corporativa importante.

¿Quién está al mando aquí? Si bien Huawei ha mantenido que sus empleados son los dueños de la empresa, a través de un plan virtual de accionariado, el 99% de los papeles reside legalmente en un sindicato aprobado por el Estado que representa a dichos accionistas. Algunos analistas señalan que eso podría dejar a la empresa vulnerable a las influencias del gobierno, bajo la estructura autoritaria de China.

Ren, el CEO y fundador de Huawei, también puede bloquear designaciones al comité de 115 miembros que representa a los accionistas. El fundador y miembros de su familia pertenecen a ese comité y también al directorio de la empresa.

Líder en mercado de telecomunicaciones

La naturaleza de la estructura de propiedad de Huawei, y el lugar de Ren en la jerarquía de la compañía, ha sido sujeto de escrutinio a medida que la tecnológica se fue convirtiendo en el mayor fabricante mundial de equipamiento para las telecomunicaciones, y uno de los líderes en la venta de smartphones.

Huawei está impedida de vender sus equipos en EEUU y ese país ha estado presionando a sus aliados para que no usen el equipamiento 5G de la firma, debido a que estima que los aparatos pueden ser usados por Beijing para monitorear o interrumpir comunicaciones.

La firma ha negado que eso pudiera suceder, y en varias entrevistas recientes, Ren dijo que desafiaría cualquier potencial orden de Beijing para espiar a sus clientes.