Hasta hace poco, las percepciones estadounidenses de la tecnología china tendían a ser esperanzadoras o despectivas. Generalmente se creía que la tecnología china representaba poca o ninguna amenaza competitiva. Pero el país asiático ha avanzado rápidamente en la cadena de valor, creando industrias de clase mundial en todo, desde 5G e inteligencia artificial hasta biotecnología y computación cuántica. Algunos expertos ahora creen que China podría destronar a EEUU como la fuerza tecnológica líder del mundo. Y muchos formuladores de políticas en norteamérica ven esa perspectiva como una amenaza existencial para el poder económico y militar de EEUU.
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