Si bien la Internet del consumidor brinda servicios de acceso a redes sociales y comercio electrónico, sobre todo a las personas que se mantienen en autoaislamiento; su contraparte industrial, enfocada principalmente en los negocios, trabaja para salvaguardar el funcionamiento normal de la sociedad, haciendo una profunda contribución, al permitir la coordinación de toda la cadena industrial en sus distintos niveles.
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