BEIJING, 5 abr (Xinhua) — El Festival de Qingming es, desde tiempos inmemoriales, uno de los más importantes en China y presenta elementos simbólicos como la limpieza y barrido de las tumbas de los antepasados, la ofrenda de alimentos a los difuntos y las salidas famliares. En los últimos años, el festival también se ha convertido en un barómetro del consumo en China a través de una serie de productos dedicados especialmente para la ocasión. Los vendedores están explorando nuevas formas de replicar el estallido del consumo en estas festividades al resto del año.
El Festival de Qingming se asocia a menudo con la quema de imitaciones de dinero de papel. Pero a medida que las preocupaciones por la sostenibilidad ganan arraigo en la sociedad, estas antiguas tradiciones pueden quedar relegadas al pasado. Un creciente número de personas están recurriendo a las ofrendas florales como forma de honrar a sus antepasados. Esto ha provocado la bonanza económica de los vendedores de flores a lo largo de todo el país. Los crisantemos son la elección más popular, y las floristerías ponen todo su empeño en ofrecer arreglos florales únicos para el festival
“Las ventas de crisantemo han aumentado de manera constante, pero los precios no se han incrementado tanto este año. Tenemos un cliente que nunca viene a comprar flores, pero realiza pedidos de 50 ramos de crisantemo durante el Festival de Qingming.” Así lo confirmó una vendedora.
Además de las flores, la repostería y las frutas también gozan de popularidad durante el festival, debido a que se utilizan como ofrendas para los antepasados y también para las reuniones y salidas familiares.
Muchas más floristerías y fruterías ultiman los preparativos para el Festival de Qingming. Las ventas se están disparando, al juzgar por las aglomeraciones de personas visitando estos establecimientos. En su interior se observan grandes cantidades de manzanas, naranjas y plátanos, algunas de las frutas más solicitadas durante el festival. A pesar de la fuerte demanda, el precio de las frutas se ha mantenido estable durante este periodo. Las floristerías se esmeran también en sus arreglos para agradar a sus clientes.
La comida es una de las partes más importantes de cualquier festividad, y así ocurre también en el Festival de Qingming. El qingtuan es un delicioso aperitivo, un plato omnipresente durante estos días. Para su elaboración, se combina zumo de ajenjo con harina de arroz glutinoso para preparar la masa que envuelve una pasta de judías. Es casi una obligación degustar qingtuan durante el Festival de Qingming, y muchos supermercados disponen de mostradores especiales que ofertan diversas marcas y sabores. El precio medio de un qingtuan son 20 yuanes, el equivalente a unos 3 dólares. En esta tienda, uno de los dependientes explica cómo su establecimiento ha añadido este año versiones de qingtuan con rellenos de pasta de judías, yema de huevo, hilos de carne de cerdo, y leche matcha.
La demanda de los consumidores durante el Festival de Qingming es predecible. Pero las empresas no se dan por satisfechas y están buscando la manera de expandir y trasladar esta bonanza de la “economía de Qingming” a otros negocios y empresas.
