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BEIJING, 16 ago (Xinhua) — Las ventas minoristas de bienes de consumo de China subieron un 2,7 por ciento interanual en julio, informó ayer el Buró Nacional de Estadísticas (BNE).

La tasa de crecimiento se desaceleró desde el aumento del 3,1 por ciento registrado en junio.

El portavoz del BNE, Fu Linghui, atribuyó la desaceleración del crecimiento al esporádico resurgimiento de COVID-19 y moderadas ventas de automóviles.

Las ventas minoristas de bienes de consumo del país sumaron alrededor de 3,59 billones de yuanes (unos 532.600 millones de dólares) el mes pasado, detalló el BNE.

Durante los primeros siete meses del año, las ventas al por menor de bienes de consumo cayeron un 0,2 por ciento interanual y se ubicaron en 24,63 billones de yuanes.

“Aunque el crecimiento de las ventas minoristas se ha moderado en julio, la tendencia de recuperación del consumo se mantiene sin cambios”, señaló Fu.

El mes pasado, las ventas de artículos de primera necesidad sostuvieron un crecimiento sostenido. Las ventas de bebidas aumentaron un 3 por ciento interanual en julio, y las ventas de grano, aceite comestible y otros productos alimenticios incrementaron un 6,2 por ciento, según los datos del BNE.

El consumo en línea continuó apoyando las ventas minoristas. En los primeros siete meses, las ventas en línea de bienes físicos subieron un 5,7 por ciento interanual, 0,1 puntos porcentuales frente al período enero-junio.

Las ventas de los principales supermercados crecieron un 4,1 por ciento interanual en los primeros siete meses, mientras que las de las tiendas de conveniencia aumentaron un 4,6 por ciento en comparación con el mismo período del año pasado, de acuerdo con los datos.

A medida que las políticas orientadas a impulsar la demanda han tomado efecto, la caída en los ingresos de restauración se ha reducido. El sector vio sus ingresos caer un 1,5 por ciento interanual en julio, lo que se redujo en 2,5 puntos porcentuales respecto al mes anterior.

Con políticas a favor del consumo, medidas de apoyo para las empresas y un mejor entorno de consumo, el consumo de China mantendrá el impulso de la recuperación y se convertirá en un motor más fuerte del crecimiento económico a pesar de todos los desafíos, recalcó Fu.