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BEIJING, 10 mar (EFE) — España, que conmemoró ayer los cincuenta años de relaciones diplomáticas con China, espera que Beijing juegue “un papel importante” para lograr la paz en Ucrania, así como reforzar los contactos y la conectividad con el país asiático tras la eliminación de la estrategia “covid cero”.

Así lo expuso el embajador español en China, Rafael Dezcallar, durante su discurso en Beijing por la celebración del medio siglo del restablecimiento de los lazos bilaterales entre los dos países.

“Durante la segunda mitad del año, España ocupará la Presidencia rotatoria de la Unión Europea. En estrecha coordinación con la Delegación de la UE en Beijing abordaremos los varios asuntos de la agenda Europa-China”, señaló el diplomático.

Dezcallar agregó que después de la presentación por parte de China de una declaración que recoge su propuesta para “acabar con la guerra provocada por la invasión rusa de Ucrania”, esperan que el país asiático “juegue un papel importante a este respecto”.

El embajador hizo hincapié en el “considerable desarrollo” de las relaciones España-China en el último medio siglo mediante un “significativo” diálogo político y la celebración regular de reuniones de alto nivel como la mantenida la semana pasada entre los respectivos titulares de Exteriores o el encuentro en noviembre entre los presidentes Pedro Sánchez y Xi Jinping.

Dezcallar confió en que estos contactos se sigan produciendo y apostilló que “en estos encuentros podemos hablar de todos los asuntos, incluyendo aquellos en los que no estamos de acuerdo, porque los amigos pueden hablar de todo”.

En el ámbito económico y comercial, el embajador destacó que las relaciones se han “incrementado considerablemente” aunque de cara a equilibrar una balanza aún favorable para China pidió “un campo de juego nivelado” para que las empresas españolas puedan operar en el país asiático en las mismas condiciones en las que lo hacen las firmas chinas en el país ibérico.

“Esperamos que el fin de la pandemia nos permita reanudar los contactos bilaterales a todos los niveles, incluyendo los académicos. Nuestro objetivo es aumentar el número de cursos de idioma español en el Instituto Cervantes y retomar nuestro apoyo a la enseñanza del español en escuelas y universidades chinas”, indicó.

Otro de los objetivos prioritarios para España es el restablecimiento “lo antes posible” del número de vuelos directos entre los dos países a niveles previos a la crisis sanitaria, algo “crucial para la reactivación del turismo”, subrayó Dezcallar.

Alrededor del 35 % de los turistas chinos que visita España repite el viaje, destacó el embajador, quien incidió en el alto aprecio hacia los visitantes del país asiático.

El embajador español valoró asimismo el buen ritmo de la cooperación bilateral en ciencia, tecnología e innovación, en especial en áreas relacionadas con la lucha contra el cambio climático.

Además, avanzó algunas de las principales actividades dentro del Año Dual de Cultura y Turismo que celebran este año los dos países, entre las que figuran dos exposiciones con fondos de los museos madrileños de El Prado y Thyssen-Bornemisza, así como muestras de Joan Miró, Salvador Dalí y Antonio Gaudí, entre otras.